El día de ayer fue un día importante en lo que fue la pelea del verano sobre los DNU. Y si bien falta ver como seguirán las cosas el gobierno ha conseguido un aval importante para la liberación de los fondos tras el fallo de la Justicia.
A pesar de esto nos interesa destacar principalmente algunas cuestiones significativas sobre este martes tan movido:
En primer lugar que volvió a la discusión social la cuestión sobre la deuda externa y alguna de sus consecuencias. Por lo que en nuestra opinión resulta un reclamo muy justo investigar la conformación de la misma, del mismo modo que resulta desmedido e impropio en ésta (y en cualquier otra coyuntura), nombrar como jefe de la misión empresarial argentino-peruana a un personaje que ha sido precisamente uno de los beneficiados por la estatización de ésta deuda a instancias del trístemente célebre Domingo Cavallo.
En segundo lugar nos deja un sabor extraño la defensa jubilosa que realizan algunos amigos kirchneristas sobre las acusaciones realizadas por el ministro de Economía a un recientemente resucitado Gerardo Morales, de una recientemente resucitada UCR (¿a instancias de quien?) y las lecciones políticas de Miguel Pichetto sobre educación cívica en el mundo del bipartidismo bienpensante...
La memoria debe ser un ejercicio serio y no sólo de defensa de divisas. (Lo otro es apenas propaganda lo cual no nos interesa en este momento).
No hace falta mucho esfuerzo para recordar el "pasado" neoliberal de Boudou. Ex amigo íntimo de Prat Gay y ferviente militante de la UCD. Tampoco del pasado menemista de Pichetto...
¿Estas son las espadas del proceso de transformación que necesitamos?
Ni que decir que lo que estamos debatiendo no es algo tan transparente como la asignación universal por hijo, sino algo mucho más controversial y polémico como es el intento del pago de una Deuda que todos sabemos que es ilegítima y que más allá de su pago o no, aún espera ser investigada.
Conviene siempre tener esta cuestiones presentes en nuestra agenda de ideas. En principio nos alegramos de que se caigan algunas caretas pero es bueno tener en cuenta que restan caer aún muchas más y que lo que está en juego es una bandera histórica del movimiento popular, como es la cuestión del desendeudamiento para poder crecer con justicia y equidad.
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